Hay muchas ideas erróneas que se han popularizado con el tiempo sobre la lactancia materna, que pueden complicar el éxito de la alimentación natural. También existen otras creencias que, a pesar que no son perjudiciales, no tienen incidencia real en la lactancia materna, como, por ejemplo, que beber cerveza no aumenta la producción de lechecomo tampoco lo hace el hecho de beber más leche. 

MITO 1: “No tengo suficiente leche”

Realidad: El cuerpo de una mujer está preparado para producir leche de calidad y en cantidad suficiente para alimentar a su bebé, independientemente del tamaño de su pecho. La leche materna varía su composición durante la toma: la leche del principio es más «aguada» y la del final es más grasa. Es prácticamente imposible que una madre no tenga la capacidad de producir leche; es el bebé quien controla la cantidad de leche que debe producir su madre.

 

MITO 2: “Se queda con hambre”

Realidad: Muchas madres, preocupadas porque su bebé no esté tomando todo el alimento que precise, deciden complementar la alimentación del pequeño con fórmula. Sin embargo, si un bebé amamantado se queda con hambre, la solución no es darle leche artificial, sino «más» leche materna.

 

MITO 3:“Mi leche es buena”

Realidad: Todas las madres tienen leche de excelente calidad, incluso las mujeres desnutridas fabrican leche nutritiva para sus hijos.

MITO 4: “Dar el pecho duele”

Realidad: Si el bebé no está haciendo el agarre correctamente la madre puede tener molestias al dar el pecho, es necesario revisar la postura. Acude a una asesora de lactancia o profesional para que te asesore.

 

MITO 5: “Con la cesárea no sube la leche”

Realidad: El tipo de parto no influye en la subida de leche, aunque algunas rutinas que se practican con las mujeres a las que se ha practicado una cesárea puede dificultar el inicio de la lactancia como, por ejemplo, separar a madre e hijo en las horas iniciales. El proceso de subida de la leche se inicia en el momento del alumbramiento, es decir, cuando la placenta sale del cuerpo, ya sea de forma natural mediante un parto vaginal o cuando es extraída por el obstetra durante la cesárea.  

MITO 6: “Debo dar leche de fórmula mientras me baje la leche”

Realidad: El Calostro es la única leche materna que se produce por hormonas y no a demanda, para producirlo solo se necesita haber estado embarazada. Cuando baje la leche, es gracias a la estimulación del pecho mediante la succión del bebé la que activará la producción de leche.

MITO 7: “El bebé tiene que beber agua”

Realidad: Si el bebé toma el pecho a demanda todas sus necesidades estarán cubiertas y, por tanto, no necesita beber agua.

 

MITO 8: “La leche materna produce caries”

Realidad: La lactancia materna contiene enzimas e inmunoglobulinas que inhiben el crecimiento de bacterias que producen las caries, por lo que lejos de producir caries, las previene.

 

MITO 9: “Si das el pecho no puedes tomar medicamentos”

Realidad: La mayoría de fármacos son compatibles con la lactancia, y la mayoría de enfermedades maternas no contraindican la lactancia materna. Para más información sobre este asunto puedes visitar la página: www.e-lactancia.org.

 

MITO 9: “La lactancia es cosa solo de la madre

Realidad: La lactancia materna es cosa de la madre y del bebé, pero el papel del padre puede marcar la diferencia para que ésta sea exitosa: entendiendo las necesidades de ambos, acompañándoles.

 

MITO 10: “No eres peor madre si no das el pecho

Realidad: La lactancia materna es el mejor alimento para el bebé, según OMS. Sin embargo, la decisión de dar o no el pecho, la duración de la lactancia materna y cómo y cuando destetarlo es una decisión de la madres que la sociedad no debería juzgar.

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